21 de septiembre de 2012

Las muy ricas horas del duque de Berry



Otoño.


Hoy entramos oficialmente en el Otoño, la estación preferida por algunos debido a los espléndidos colores que la adornan. A mi personalmente no me gusta mucho por la perdida gradual de luz a lo largo del día y la vuelta a las rutinas cotidianas y al maldito frío, pero reconozco que tiene su encanto.

Al igual que en la entrada para la inauguración del verano, veamos las tres miniaturas mediveales que realizaron los hermanos Limbourg en este libro de horas regalo del Duque de Berry.

Vamos a disfrutar de estas preciosas láminas y ver que les deparaba el otoño del siglo XV a señores y campesinos. 





Octubre. Un poquito de siembra por aquí y por allá, con espantapájaros armado incluido, que se lo comen todo.



Noviembre. Ya se sabe que a todo cerdo le llega su San Martín. Noble animal....



Diciembre. Se nota el frío y los bosques a medio pelar, tiempo de caza por lo que se ve.


Bueno, suerte a todos y a ver si encaramos bien el final de este año tan complicado...

3 comentarios:

  1. Te deseo una buena y abundante "cosecha" de imágenes para este Otoño.
    Saludos.

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  2. Coincido en que me deprime la gradual reducción de las horas de luz, y encima te dan el golpe de gracia con el cambio de hora y así, de un día para otro ya es de noche a las seis y veinte de la tarde. ¿Cuándo, CUÄNDO dejarán en paz la hora? ¿Cuando se consiga por fin la fusión nuclear? Creo que ni por esas, ja ja. Mención aparte al maldito frío. Odio el frío. Los problemas que me causa ni se comparan a los del calor.
    En fin, la naturaleza de nuestro mundo así es. Muy bonitas las miniaturas. ¿La de diciembre no tiene un aire a Central park con los rascacielos al fondo? Je je.

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  3. Gracias nenes.

    Que punto lo de Central Park, es verdad...

    Lo del cambio de luz, no se, fíjate que creo que se nos haría raro sin él.... no se.

    Saludos

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